Categories Noticias

¿Por qué se daña una fachada?

Debido a diferentes factores ambientales y humanos las fachadas de las viviendas acaban sufriendo grandes desperfectos

Los cambios de estación provocan que muchos usuarios y propietarios comiencen a pensar en cómo conservar las infraestructuras de sus casas o edificios. Uno de los puntos más importante de una infraestructura es la fachada, ella es la que retiene gran parte del peso y además es la que crea seguridad a los que viven dentro de ella.

Las fachadas son las más expuestas a los cambios de temperatura, a las lluvias, al viento y a los días de sol. Todo esto acaba afectando a los materiales que la componen, llegando a agrietarse o corromperse, lo que podría provocar una rotura del aislamiento e incluso filtraciones de agua.

La fachada de una casa o edificio actúa de forma similar a la piel de las personas. Ella envuelve y protege al edificio de los agentes externos que lo desgastan. Su buen estado favorece a regular la temperatura interior de la vivienda, entre otras cosas.

Las lesiones que se producen en la fachada se aprecian a simple vista, sin embargo hay ocasiones en que los habitantes de la vivienda se acostumbran a ver estos problemas y no les prestan la atención necesaria. Esto es un error muy común que a largo plazo se acaba pagando muy caro. Se debe saber la importancia de cualquier pequeño desperfecto, pues estos pueden convertirse un problema grave, y mucho más costosos de solucionar, que si se hubiera reparado a tiempo o realizado las tareas periódicas de mantenimiento.

Antes de cualquier arreglo lo primero es evaluar el daño consultando con especialistas, y posteriormente solicitar que adquieran los productos en la tienda de pinturas No Solo Pinturas, pues allí se puede adquirir todo lo necesario para solucionar los problemas que la pintura tenga en las paredes y fachadas.

Daños más frecuentes que se producen en una fachada

Según la empresa Rodríguez Ross, que son especialistas en restauración y rehabilitación, además de dar diversos servicios, consideran que los puntos que se analizarán a continuación son los daños más comunes que sufren las fachadas, debido al descuido humano y a los agentes externos.

Suciedad

En las grandes fachadas, sobre todo en las ciudades, suelen aparecer manchas debido a la polución y otros factores, como la zona de bajada de agua desde los tejados o las cubiertas. Estas manchas no generan graves  problemas en si para la estructura del edificio, pero deben corregirse o al menos utilizar pintura antihumedad para que no manchen ni penetren en el interior de la estructura.

Presencia de Microorganismos (moho)

El moho, los hongos, las algas o líquenes suelen aparecer en las fachadas cuando hay algún problema de humedad. Las condiciones meteorológicas y la orientación de la fachada al norte u oeste propician la formación de parásitos. Para solucionar este problema lo mejor es buscar una forma de realizar una impermeabilización de fachadas, que las proteja de los agentes externos.

Fisuras y grietas

Las grietas afectan la estructura del edificio, son el síntoma de una deficiencia en la construcción, de un movimiento sísmico o de un problema en los cimientos. Cuando aparecen este tipo de grietas hay que consultar a una empresa especializada, para que realice un estudio y una rehabilitación de fachadas si fuera necesario. De esta forma se evitarán posibles desprendimientos y no penetrará el agua los días de lluvia, factor que puede estropear la estructura interna de la pared.

Humedades por filtración y capilaridades

Las humedades por filtración se producen por presencia de grietas o por la utilización de materiales de mala calidad en las azoteas, fachadas o cubiertas. Donde aparece una grieta, un desprendimiento ligero u hongos en la pared, es porque los materiales que se utilizaron para la impermeabilidad no son los adecuados.

La humedad por capilaridad se produce cuandoes absorbida del suelo por el material de la fachada, provocando daños que pueden ser visibles tanto en el interior como en el exterior. Una de las consecuencias de este tipo de humedades es la aparición de microorganismos y de malos olores en el lugar.

Desgaste de la pintura

La pintura del exterior está expuesta diariamente a condiciones climáticas adversas. Dependiendo del tipo de pintura y de la composición el desgaste será diferente.

Un desgaste muy común se denomina “caleo”, este es producido por la pérdida de cierto componente en la pintura, lo que acaba provocando que los pigmentos queden sueltos. Se puede comprobar muy fácilmente si esto está sucediendo, solo será necesario pasar los dedos por la pared y si estos se manchan con pintura en formato de polvo, es que está sucediendo.

También pueden darse otras situaciones, como que la pintura dilate y se fragmenta en pequeñas grieta o que se acabe erosionando y vaya desapareciendo poco a poco.

Leave a Reply

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *