La venta al por mayor, es una etapa intermedia entre el origen de un bien o servicio y su distribución final a un usuario final a través de los canales de comercio al por menor. A pesar de la aparición de los llamados clubes de mayoristas dirigidos al mercado de consumo, el comercio al por mayor suele implicar transacciones entre empresas.
Tradicionalmente, la venta al por mayor se asocia con la distribución de productos físicos, como la venta de electrodomésticos al por mayor pero también existen mercados mayoristas para otros sectores económicos, como la energía y los servicios de telecomunicaciones.
En términos de valor, la venta al por mayor de mercancías se divide casi por igual entre el comercio de bienes duraderos y el comercio de bienes no duraderos. Sin embargo, los bienes duraderos implican más empresas, más trabajadores y nóminas más altas.
Algunas cifras a tener en cuenta
La venta al por mayor ofrece un potencial de mercado de consumo ampliado en términos de ubicaciones geográficas y poder adquisitivo de los consumidores, al tiempo que proporciona un flujo de caja para el fabricante. La importancia de la venta al por mayor se debe a varias razones principales. En primer lugar, todos los bienes y suministros necesarios para su producción pasan por algún tipo de agente intermedio y sistema de venta al por mayor. Por esta razón, el funcionamiento eficaz de los vínculos mayoristas contribuye directamente al bienestar económico de una sociedad.
En segundo lugar, para la mayoría de los pequeños productores, una ubicación geográfica inmediata suele ser insuficiente para proporcionar y mantener una base de clientes continua para sus operaciones. Como medio para vender sus productos, los pequeños productores deben tener vías para desarrollar segmentos de mercado de clientes potenciales y deben asegurarse de que sus productos son de la calidad que los clientes quieren a precios que están dispuestos a pagar. El papel de los mayoristas es proporcionar enlaces a una base de mercado ampliada, es decir, descubrir dónde se encuentran los clientes y cuál es la mejor manera de llegar a ellos. En este sentido, la venta al por mayor utiliza el tiempo y el lugar en relación con la información y la disponibilidad. Los mayoristas crean utilidad a través de la posesión de bienes que pueden ser utilizados por los compradores a un coste inferior al del intercambio directo.
Por último, los mayoristas actúan como canales de distribución e interactúan con los mercados y los productores dentro de los mercados. Mientras que la venta al por mayor y la venta al por menor desempeñan funciones similares en el sentido de que reciben, almacenan y distribuyen bienes, la importancia de la venta al por mayor radica en su capacidad de moderar las fluctuaciones de la oferta y la demanda y de hacer frente a transacciones de mayor envergadura con menos énfasis en las técnicas de venta y los servicios y la promoción de productos. La venta al por mayor tiene la capacidad de ajustar la distribución de mercancías de las zonas excedentarias a las deficitarias.