Se ha confirmado la muerte de 98 personas después de que un terremoto de magnitud 6,9 sacudiera la isla de Indonesia y el vecino Bali.

Un segundo terremoto ocurrió durante la mañana, se trata de una replica de escala 5.2 cuyo epicentro fue más alejado, lo cual se sintió con menos impacto, pero con el mismo miedo ya que la destrucción es realmente muy grande y muchas personas más a permanecer refugiadas en los distintos centros de asistencia.

Se utiliza la playa y toda la costa para asistir a los evacuados, ya que la zona es una región turística y muchos visitantes requieren asistencia. Muchos de los principales caminos de la isla y de la ciudad de Bali están interrumpidos con escombros, se trata verdaderamente de un verdadero caos y todavía permanecen muchas personas desaparecidas.

Es probable que ocurra otra replica del terremoto en las siguientes horas y días, se espeta que esta sea más adentro del océano que por sobre la isla.