La emblemática torre del reloj londinense hace ya un tiempo se encuentra dentro de un proceso de restauración. El Big Ben, así conocido mundial-mente, se completo en 1859 y desde ese siglo que no recibía ningún tipo de mantenimiento exterior, si muchas veces se había trabajado sobre la parte interna.
Lo cierto es que a principios del 2017 cuando comenzó el proceso de restauración las quejas aparecieron pero no eran demasiadas. A medida que fue progresando el trabajo y se fueron colocando cada vez más andamios y grúas alrededor, la complicación con el turismo y los comerciantes de la zona fue mucho mayor, ya que todos estos elementos además de bloquear casi completamente la visión de la torre y del reloj, también han bloqueado el acceso a algunas calles muy cercanas a la torre y sin dudas esto es un problema.
Se espera que la restauración continue, aproximadamente un año más, que no es realmente un problema, sabiendo que se trata de uno de los monumentos más importantes del mundo.