Lo ocurrido en Portugal, puntualmente en playa de Ericeira, ha convido no solo a toda la ciudad, sino que es noticia en el mundo entero. Durante la madrugada, un grupo de pescadores que se preparaba para zarpar se encontró con la horrorosa escena.

Una pareja de australianos de treinta-cuatro años yacía sin vida sobre las arenas de la playa, después de evidentemente haber caído desde treinta metros desde un murallón donde prendas de vestir y otros elementos quedaron colgando de las piedras. Al parecer cayeron al intentar sacar una «selfie» desde una perspectiva complicada.

Según las autoridades, el cuerpo de la mujer estaba «partido al medio». El hombre fue encontrado agarrado a un poste de señalización en el arenal, lo que supone que se mantuvo con vida un tiempo más. Tenía heridas expuestas y muy graves. La identidad de la pareja se pudo comprobar inmediatamente gracias al reconocimiento que dieron los empleados del hostel donde se hospedaban.