La UE ha iniciado este miércoles los primeros trámites para colocar a Italia dentro del «brazo correctivo» del Procedimiento de Déficit Excesivo.

El problema de Italia no es el déficit, a pesar de que el Gobierno ha propuesto para el año que viene triplicar, hasta el 2,4% el objetivo final. Sigue estando por debajo del 3%. Otra cosa muy diferente es la deuda, que cerró 2017 en el 131,2%, equivalente a unos 37.000 euros por habitante, superando «el 60% del valor de referencia del PIB del Tratado».

La gran deuda es parte del deficit constante de los italianos, que con planes de ajuste el Gobierno no ha podido reflotar el presupuesto. A pesar de los intentos de Italia por estar acorde a los estándares de aporte que sostienen el convenio de la UE. Comienza un largo proceso a cargo de los Comisarios designados de evaluar todas las tratativas que hacen a los incumplimientos de este acuerdo.

Los ministros de Economía de la Eurozona analizarán los Presupuestos nacionales el próximo 3 de diciembre.

El vicepresidente del Gobierno de Italia, Matteo Salvini, ha ironizado con el rechazo de la Comisión Europea de los Presupuestos para 2019, al afirmar que en Roma esperan «también la carta de papa Noel». Comentario que ha sido recibido de mala manera.