Según informa la televisión estatal, más de 700 personas resultaron heridas en un terremoto de 6,3 grados de magnitud que sacudió el oeste de Irán el domingo por la noche.

El epicentro se ubicó en la provincia de Kermanshah, donde el año pasado más de 600 personas murieron en el terremoto más mortal del país en más de una década. Según informes, los temblores se sintieron en toda la región, con informes de al menos una muerte en el cercano Kurdistán iraquí.

No se reportaron víctimas mortales en Irán, ni ningún daño importante.

El terremoto golpeó a 20 km de la ciudad de Sarpol-e Zahab, a una profundidad de 10 km. «Hemos tenido 729 heridos, 700 de ellos han sido tratados y liberados (…) 18 personas fueron hospitalizadas», dijo el lunes el gobernador provincial, Houshang Bazvand.

La televisión estatal transmitió imágenes de casas dañadas en Sarpol-e Zahab, donde varias personas siguen sin hogar después del destructivo terremoto del año pasado. Decenas de equipos de rescate, así como el ejército nacional y la Guardia Revolucionaria de Irán han sido desplegados, dijeron las autoridades.