«Que se haga justicia, que se pudran en la cárcel 30 años y que ningún otro padre ni madre tenga que vivir lo que estoy viviendo yo», dijo el padre biológico de Aarón, el niño que falleció en el hospital después de recibir una paliza de su madre y de la pareja de su madre.
El niño habría ingresado al hospital fruto de los golpes de los malos tratos, desde hacia ya un tiempo el niño era golpeado constantemente por su madre y por su nueva pareja. El padre biológico del niño habría trata de avisar a las autoridades sin respuesta real y la muerte no fue evitada. Hoy vive un dolor muy grande y pide la condena máxima para la pareja que ha terminado con la vida de su hijo y que hoy enfrente el juicio por asesinato.
La madre se había mostrado ya una mujer difícil, que mantenía una relación a escondidas con quien fue su pareja asesino al niño. También durante la relación con el padre biológico desaparecía sin avisar y muchas veces se llevada el niño con ella también. Cuenta también que la madre lo había bloqueado, no le permitía hablar con su hijo porque decía tener una nueva vida y que a su actual pareja le molestaba que se comunicase.