El presidente de los Estados Unidos junto con el presidente de Canadá y el presidente de México firmaron el sucesor del Tratado de Libre Comercio de América del Norte, un nuevo acuerdo comercial. El antiguo acuerdo daba por sentado el libre comercio respecto de muchas producciones que en la actualidad el gobierno tanto de Estados Unidos como de Canada busca proteger.
En este sentido, re-negociar a Nafta fue un compromiso clave de la campaña de la Casa Blanca 2016 de Trump. El presidente de Estados Unidos afirmó que «cambia el panorama comercial para siempre». En este nuevo acuerdo comercial la distribución de metales y el valor de las tarifas de la manufactura de metales sera muy distinta. La alianza promueve los mercados regionales por sobre cualquier otro tipo de producción del resto del mundo. Incluso deja fuera a los interés de la OTAN.
También se tienen en cuenta dentro del nuevo acuerdo productos relacionados con los alimentos, las semillas y lácteos.