No hay trabajo sobre la faz de la tierra que no implique algún tipo de riesgo así sea mínimo, sea porque haya que estar en la tranquilidad de una oficina recibiendo llamadas telefónicas y apuntando mensajes o porque se forme parte de la brigada de bomberos de la ciudad, todos los lugares de trabajo representan un peligro potencial para quienes allí trabajan.
La Revolución Industrial marcó un hito en la historia laboral, pero esta se ha visto empañada por sucesos dolorosos que en su momento costaron las vidas de cientos de trabajadores alrededor del mundo y muchísimos otros viven con las secuelas de eventos que se pudieron haber evitado si las empresas hubiesen tomado las medidas preventivas correspondientes.
A partir de 1833, cuando Inglaterra en la “Factory Art” reguló el trabajo de las mujeres y los niños, los Estados comenzaron a tomar parte en la mejora de las condiciones de trabajo exigiendo a los empleadores cada vez mayores medidas de protección hacia quienes desarrollan actividades en el marco de la prestación de cualquier servicio remunerado.
Mejor prevenir que lamentar
Esa es básicamente la consigna de la Prevención de Riesgos Laborales, anticiparse a cualquier situación que pueda afectar la integridad del trabajador, incluso proteger su vida; es decir, influir directamente en el factor de riesgo antes de que se convierta en un accidente o una enfermedad laboral.
La prevención de riesgos laborales va precedida de un estudio denominado “Evaluación de Riesgos”, en ese estudio se analiza minuciosamente todo el entorno tangible e intangible de la empresa y prepara un informe que derivará en todas las medidas de prevención que se indiquen en él.
La Prevención de Riesgos en las Empresas es materia de estudio
Con el paso de los años y la diversificación de la actividad productiva, son millones las personas que se han involucrado en el mercado laboral en cualquiera de sus sectores; por lo tanto, la Prevención de Riesgos Laborales también ha ampliado su campo al punto de que se han desarrollado diferentes disciplinas para poder atender adecuadamente cada una de las áreas de enfoque.
Estas disciplinas cubren aspectos muy amplios en lo que a condiciones de trabajo se refiere, muchas veces se solapan entre sí y al mismo tiempo son interdependientes. La nueva realidad laboral obliga a que los campos de estudio se adapten también para cubrir esta necesidad en las empresas, es decir, la presencia de personal calificado para evaluar y prevenir riesgos en el ambiente laboral es obligatoria.
En consecuencia son cada vez más las instituciones que ofrecen el Curso de prevencion de riesgos laborales con la finalidad de preparar adecuadamente al personal que se encargará de hacer el entorno de cada trabajador lo más seguro y cómodo que sea posible y es que el Curso prevencion riesgos laborales no podrá dejarse de lado si se pretende cumplir a cabalidad con la legislación vigente.
Con la Comida no se Juega
Las enfermedades de origen alimentario son un tema que se ha tomado cada vez más en serio a nivel global, porque son muchas las epidemias que se han desencadenado a partir de alimentos contaminados y si se contabilizan los casos aislados, es bastante elevado el número de personas que terminan en la consulta médica con trastornos debido a la ingesta de alguna comida de dudosa procedencia y que con toda seguridad ha sido preparada sin cumplir las normas de Higiene y Manipulación de Alimentos.
Realizar el Curso Manipulador de Alimentos es obligatorio para todo aquel que tenga en mente trabajar en cualquiera de los procesos que impliquen la producción de comida, no solo de la preparación o producción en sí; también lo es para los que piensan participar en actividades de empaquetado o envasado, transporte, distribución, venta, almacenamiento y cualquier otra actividad que lleve implícito tener algún contacto, así sea indirecto, con la comida.
Cada vez que una empresa relacionada con la producción de alimentos recibe la inspección de los organismos responsables a la hora de velar por las condiciones de Higiene y Salubridad; es imperativo que muestre los certificados sanitarios vigentes de cada trabajador.
Por lo tanto, cualquier aspirante a trabajar con o cerca de la comida deberá presentar junto con su documentación el Carnet Manipulador de Alimentos que lo acredite para tal fin.
La capacitación es vital
La preparación y acreditación de un manipulador de alimentos es un asunto que las instituciones dedicadas a tal fin se toman cada vez más en serio.
En primer lugar se ocupan de que reciban información acerca de las medidas y normas de higiene personal, dentro y fuera de las instalaciones donde habrá de trabajar; también les forman en cuanto a las condiciones de almacenamiento y conservación de los diferentes alimentos.
Por otro lado y al terminar el curso, los manipuladores de alimentos deberán ser capaces de identificar las diferentes fuentes de contaminación alimentaria y saber qué medidas tomar para mantener a todos esos agentes lejos de los alimentos que pasan por sus manos.